Cuando las cosas comienzan a salir como no deseamos, como no nos conviene, sentimos que está todo patas arriba, eso nos negativiza, comenzamos a ver todo mal. Pero no necesariamente significa que sea malo, sino que se está orquestando un cambio en nuestra realidad, ( cambio de trabajo, de localidad, cambio de jefe, de compañeros, mudanzas, de pareja, hijos que se van, etc) , y de nosotros solamente dependerá el resultado.
Si nos aferramos a lo que fue y ya está mutando, tendremos sufrimiento , pues no podremos retenerlo. Por ello, será bueno observar hacia donde va cambiando la situación y escoger como nos gustaría o nos sería útil que continuara.
Es una estrategia para incorporarnos y ordenar ese presente, pues como ya está en marcha energéticamente la situación, solo resta agregar nuestra voluntad y deseo.
La situación de cambio , puede estar brindando una oportunidad de optimizar nuestra vida.
Los deseos, son algo que siempre consideramos fuera de nuestra realidad, no los tenemos, por ello los deseamos, no los tenemos en nuestro poder, están fuera, utiliza entonces, la propia energía del cambio para incorporar tu deseo a lo que ya está en marcha.
Atreverse a tomar cada situación de cambio como oportunidad solo tiene resultados positivos.
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