La guerrera sin escudo I

La guerrera sin escudo I

Antonio no toleraba una frustración. Es el mayor de tres hermanos, pero por alguna razón había tenido la corona de rey por mucho tiempo. A pesar de que ya no era el hijo único, lo hacían sentirse un rey.
 
Todas las personas les dicen a sus papás que era muy bonito, y sí , así era.
No es simpático. Manifiesta abiertamente lo que no le agrada. De pequeño lo hacía con un berrinche y de grande con una escena, gritos y malos modos.
 
Crece, termina la escuela primaria y a duras penas el secundario. No es su problema la falta de capacidad sino la frustración. No tolera no ser el mejor y menos  que no coincidan con sus ideas, que son las únicas correctas. Se frustra por todo , y mucho más si no es elegido primero para tal o cual cosa.
 
Desea vestir bien, tener un buen auto, adelantos tecnológicos, el último móvil y por ahora ,no sabe qué más. Sí seguro quiere una pareja, que le complete la imagen. Antes que ninguna otra cosa, necesita ser admirado, contemplado, servido.
 
 
Por intermedio de su padre logra un puesto en un organismo estatal. Cumple, va cada día. Realiza la tarea. Nunca nada más. Parece no tener aspiraciones. Pero lo que subyace es el miedo a fracasar.  A no ser lo suficientemente bueno y que eso no combine con su saco de marca, su corte de cabello , su perfume …y sus aires de señor.
 
Como desea ser visto y admirado, comienza la carrera de modelo, y no la termina, pues cree que sus docentes nada tienen para aportarle. En una ciudad pequeña donde vive, posee algunas oportunidades, y no da ningún otro paso.
¿ Las razones ? El miedo a ser rechazado, a competir, a ser descalificado … en su interior, sabe que eso no lo toleraría.

Lo externo para él es lo más importante, tanto que se olvida de los modales. Luce como una portada de revista, y en contrapartida se comporta con estallidos de ira y modos bruscos, que se parecen más a los de un niño o una persona sin completar que al modo del hombre que desea aparentar.

Con el tiempo, cerca de sus 25 años, se enamora o eso cree. Entabla una relación con una joven, que queda embarazada a los pocos meses. Rápidamente pasa a vivir en la casa de ella, junto a sus padres.Esa nueva realidad lo seduce. Pues posee dos mujeres que le admiran y le contemplan sus caprichos y un hombre mayor (su suegro), para quien viene a ocupar el sitio de ese hijo varón que nunca llegó a tener.
 
Nace su niño y el idilio se termina. Se siente dejado de lado, no escogido, no preferido, y eso lo separa. Se vuelve con sus padres. Siente que su hijo ha roto su estabilidad, por ello en esos primeros años lo ve poco.  Y le queda lo de siempre, lo de afuera, lo bello, lo que causa admiración…
 
Continuará.
www.evelynjeanette.com